Mi nombre es José Andújar Almansa, profesor de literatura en el I.E.S. Alborán de Almería; os presento el TALLER DE LITERATURA POTENCIAL, del que han formado parte mis alumnos del programa ANDALUCÍA PROFUNDIZA a lo largo del curso 2013-14. ¿Que qué es un taller de literatura potencial? Un laboratorio de palabras y de imágenes, donde se puede experimentar con ellas sometiéndolas a la presión y temperatura de los diversos lenguajes artísticos: poesía visual, cine, microrrelato, vídeo, fotografía...
Esbozo aquí un posible plan de trabajo:
Preámbulo
Fundado en 1960
por el escritor Raymond Queneau, y animado por la participación de escritores y
artistas como Italo Calvino, Georges Perec o Sophie Calle, el OULIPO, siglas en
francés del Taller de Literatura Potencial, fue concebido como un modo de llevar a cabo una exploración sistemática y, al mismo
tiempo, lúdica del lenguaje en beneficio de la escritura. Esta actividad, que
hoy presentamos, pretende ser, a la vez, un homenaje a los creadores de ese
fascinante taller y una manera de poner en práctica a lo largo del proyecto con
nuestros alumnos diversos métodos de composición, tan
creativos como poco convencionales. Siempre bajo el principio de la imaginación
y el juego, es decir de la imagin-acción.
Se trata de dar un paso más allá con el fin de ampliar nuevos horizontes
cognoscitivos. Para ello pondremos en práctica, convenientemente adaptadas,
muchas de las técnicas empleadas por los originales miembros del OULIPO: microrrelatos
de 1 a 8
líneas, diversos ejercicios de estilo, variaciones sobre un mismo tema, juegos
verbales, artefactos narrativos, inventarios, alteración de expectativas de
sentido, etc. Nuestro Taller de Literatura Potencial aspira a convertirse en un espacio de experimentación, diseñado para adquirir
nuevas herramientas expresivas en relación, además, con otros lenguajes
artísticos como el cine, el vídeo o la publicidad.
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Raymond Queneau y Georges Perec, fundadores del OULIPO |
Objetivos
1- Identificar los procedimientos retóricos,
estilísticos del lenguaje literario o simbólico y su uso dentro de otros medios
artísticos: cine, pintura, vídeo-art, fotografía. Se pretende con esto que el alumno tome conciencia del
lenguaje y de su infinita capacidad generativa y creativa. Se usará material
relativo a la expresión de los diversos medios artísticos.
2- Pasar a la imagin-acción, es decir a la práctica.
Se detllan algunas iniciativas que irán elaborándose en el el transcurso de la actividad:
a. Construir
textos por medio de variaciones estilísticas y retóricas en torno a un mismo tema de partida. A esto se
llama «Ejercicios de Estilo». Por ejemplo, partimos del siguiente texto de Raymond Queneau:
Relato: «Una mañana a mediodía, junto al parque
Monceau, en la plataforma trasera de un autobús casi completo de la línea S (en
la actualidad el 84), observé a un personaje con el cuello bastante largo que
llevaba un sombrero de fieltro rodeado de un cordón trenzado en lugar de cinta.
Este individuo interpeló, de golpe y porrazo, a su vecino, pretendiendo que le
pisoteaba adrede cada vez que subían o bajaban viajeros. Pero abandonó
rápidamente la discusión para lanzarse sobre un sitio que había quedado libre.
Dos horas más tarde, volví a verlo delante de la estación de Saint-Lazare,
conversando con un amigo que le aconsejaba disminuir el escote del abrigo
haciéndose subir el botón superior por algún sastre competente».
Acto seguido,
Queneau nos muestra la posibilidad de reescribir el mismo texto en diferentes direcciones. Las variaciones textuales obtenidas reciben nombres como "Retrógrado", "Punto de vista subjetivo", "Amanerado":
Variación 1 Retrógrado: «Te
deberías añadir un botón en el abrigo, le dice su amigo. Me lo encontré en
medio de la plaza de Roma, después de haberlo dejado cundo se precipitaba con
avidez sobre un asiento. Acababa de protestar por el empujón de otro viajero
que, según él, le atropellaba cada vez que bajaba alguien. Este descarnado
joven era portador de un sombrero ridículo. Eso ocurrió en la plataforma de un
S completo aquel mediodía.»
Variación 2 Punto de vista subjetivo: «No estaba descontento con mi vestimenta, precisamente hoy. Estrenaba un sombrero nuevo, bastante chulo, y un abrigo que me parecía pero que muy bien. Me encuentro a X delante de la estación de Saint-Lazare, el cual intenta aguarme la fiesta tratando de demostrarme que el abrigo es muy escotado y que debería añadirle un botón más. Aunque, menos mal que no se ha atrevido a meterse con mi gorro. Poco antes, había reñido de lo lindo a una especie de patán que me empujaba adrede como un bruto cada vez que el personal pasaba, al bajar o al subir. Eso ocurría en uno de esos inmundos autobuses que se llenan de populacho precisamente a las horas en que debo dignarme a utilizarlos».
Variación 3 Amanerado: «Eran los aledaños de un
julio meridiano. El sol reinaba con todo su esplendor sobre el horizonte de
múltiples ubres. El asfalto palpitaba dulcemente, exhalando ese tierno aroma de
alquitrán que origina en los cancerosos ideas a la par pueriles y corrosivas
sobre el origen de sus dolencias. Un autobús, de librea verde y blanca, blasonado
con una enigmática S, vino a recoger, junto al parque Monceau, un pequeño pero
agraciado lote de viajeros candidatos a los húmedos confines de la disolución
sudorípara. En la plataforma trasera de esta obra maestra de la industria
automovilística francesa contemporánea, donde se amontonaban los transbordados
como sardinas en lata, un pillastre que frisaba la treintena y que llevaba,
entre un cuello de una longitud casi serpentina y un sombrero cercado por un
cordoncillo, una cabeza tan sin gracia como plúmbea, alzó la voz para
lamentarse, con amargura no fingida y que parecía emanar de un frasco de
genciana, o de cualquier otro líquido de propiedades semejantes, de un fenómeno
consistente en empujones reiterados, y le dio a su lamento el tono agrio de un
viejo vicario que se hace pellizcar el trasero en un mingitorio y que, por
excepción, no le apetece en absoluto tal delicadeza y no entra por uvas. Pero,
al descubrir un sitio libre, se lanza en pos de él. Más tarde, cuando el sol
había bajado ya algunos peldaños de la monumental escalera de su parada
celeste, y cuando de nuevo me hacía vehicular por otro autobús de la misma
línea, observé al mismo personaje descrito anteriormente moviéndose en la plaza
de Roma de forma peripatética en compañía de un individuo que le daba, en esta
plaza consagrada a la circulación automovilística, consejos de una elegancia
tal que no iba más allá de un botón.»
¡¡un momento, por favor, un momento!!
hemos decidido pasar al contraataque
Los alumnos se estrenan en el Taller de Literatura Potencial haciendo nuevos
"Ejercicios de estilo", en clara competencia con Queneau. He aquí algunos ejemplos:
Variación 4 Francisco Parrado/Daniel Fuentes: "Aquella
soleada mañana, un hombre partió de su casa hacia la plaza de Roma. Por
lo visto, el susodicho era forastero, pues llevaba el abrigo demasiado
escotado y su gorro tenía un cordón en lugar de la tradicional cinta. El
hombre decidió ir en autobús . Cuando el autobús llegó, se subió a él
pero no pudo sentarse ya que no quedaba ningún asiento libre. Por el
trayecto tuvo numerosas discusiones con un señor entrado en años que no
cesaba de darle codazos. A las pocas paradas, un asiento quedó libre.
Nuestro hombre aprovechó la ocasión y se sentó. Tras varios minutos de
viaje, el autobús paró en
Saint-Lazare.
Allí le esperaba un antiguo amigo que, nada más saludarlo, le dijo: "Deberías ponerle un botón más a tu abrigo".
Variación 5 Juan Enrique López/Cristina Herrerías: "Tras
un ajetreado día, nuestro señor (conocido como Tony da Silva) se
dirigió hacia la parada de autobús más cercana. Llegó y tomó el autobús
que iba a la plaza de Roma. Nada más entrar, vio a un hombre con una
extraña indumentaria. Llevaba el abrigo muy escotado y su sombrero tenía
un cordón en lugar de una cinta. Tony tomó asiento. De repente, escuchó
una acalorada pelea entre el extraño hombre y un anciano que estaba
allí. Poco a poco el autobús se quedó vacío y el extraño hombre se sentó
al lado del señor da Silva. Pasaron cuarenta minutos y el autobús se detuvo. Ya habían llegado. Se bajó y el extraño hombre le seguía. Tony continuaba andando cuando oyó a un hombre que
le decía al tipo extraño:
"Deberías añadirle un botón a tu chaqueta".
hummm
ESTÁ BIEN,
CONTINUEMOS CON EL PROYECTO:
b. Intentar mediante la escritura, y las
técnicas de la prosopografía, la etopeya y el retrato, una descripción pormenorizada de diversos objetos o realidades sugeridas en el aula.
c. Intentar valerse de un lenguaje simbólico, no verbal,
para expresar esas mismas realidades sugeridas. El
procedimiento puede consistir, por ejemplo, en la composición de poemas
visuales o en la captura de imágenes en Internet para dotarlas de nuevo
significados, al margen de su contexto original.
3- Fomentar la producción de textos creativos, utilizando como mecanismo
principal la interacción entre el lenguaje literario y otros lenguajes poéticos
o artísticos. Para ello se plantea trabajar con fotografías de Chema Madoz y
Carlos Pérez Siquier; con poemas visuales de Joan Brossa; con pinturas murales
de Banksy; con ejemplos fílmicos de Buñuel y Kuleshov; con vídeos de Bill Viola.
Con todo esto se pretende explorar el dominio de los mecanismos expresivos,
simbólicos, estructurales y estilísticos que deben servir para expresar
formalmente un contenido artístico.
4-
Construir microrrelatos de entre 1 a 8
líneas de extensión aproximadamente.
la literatura no tiene esencia, nada en ella se halla a salvo de la excepción, salvo la excepción misma